viernes, 11 de abril de 2008

Laicismo

El laicismo responde al derecho que tiene toda persona a ejercer la libertad de pensamiento y de conciencia, a no ser marcada, ni discriminiada en función de las ideas que sostenga. Supone la separación real entre el Estado, que representa la ciudadanía, y las confesiones religiosas u otras doctrinas ideológicas o filosófocas. El Laicismo, al tiempo que garantiza la libertad de culto, impide que las distintas iglesias ocupen espacios y obtengan privilegios que no les corresponden, al no responder sus objetivos al interés del conjunto de la sociedad, sino sólo al de un grupo de personas que comparten las mismas creencias.

En una sociedad laica caben TODOS (creyentes y no creyentes), y los poderes públicos protegen y amparan la libertad religiosa y los distintos credos y filosofías que se han ido desarrollando a lo largo de la historia. Sin embargo, sectores que gozan de fuertes privilegios y que proceden de la etapa predemocrática, en la que el Estado era oficialmente católico, tratan de confundir a la opinión pública, al reaccionar el laicismo con la falta de valores y el anticlericalismo, algo totalmente falso.

No es el laicismo, por tanto, un camino que pretenda eliminar creencias religiosas o promover el ateismo, como quieren creer los jerárquicos de la iglesia. Puede haber, y de hecho los hay, laicistas católicos. Un ejemplo de ello son mis propios progenitores. Fieles cristianos que creen y promueven las ideas que Jesucristo predica en la Biblia. Sin embargo, tienen muy claro que la institución de la Iglesia es meramente eso, una institución, y que por tanto debe encuadrarse en un nivel fiscal y social similar al de otras instituciones: ONG's, asociaciones deportivas, políticas, filosóficas, o incluso otras confesiones religiosas que no tienen tanta importancia en nuestro país. Así que existen ciudadanos laicos que además se declaran creyentes, agnósticos, ateos,... etc.

No es que haya que eliminar la institución eclesiástica. Es simplemente, alejarla del nivel al que se encuentra el Estado. Desde la dictadura fascista en España, la Iglesia ha ido de la mano del gobierno del Estado, de manera que la gran mayoría de las normas eran impuestas de manera directa bajo la aceptación de la confesión religiosa católica. En nuestro país aún tenemos una grandísima influencia de la iglesia sobre la legislación, justicia, o moral.

En el punto 3 del artículo 16 de la Constitución del 78 se declara que: NINGUNA CONFESIÓN TENDRÁ CARÁCTER ESTATAL. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones. Por tanto, ¿qué sentido tienen los siguientes hechos?

-Nuestro presidente del gobierno ha de jurar su cargo ante la constitución, el Rey y un CRUCIFIJO.
-Un casamiento por vía eclesiástica supone de manera inmediata la efectividad del contrato matrimonial por vía civil, no siendo así con las ceremonias realizadas bajo otras creencias.
-Alcaldes y concejales de una mayoría de pueblos y ciudades son la comitiva oficial, junto con sacerdotes, obispos y demás representantes eclesiásticos, de los actos y procesiones que se desarrollan en la Semana Santa
-Nuestro calendario se ciñe a fiestas católicas: Natividad del señor, Día de Reyes, Semana Santa, Corpus Christi, Inmaculada, ... Todas las fiestas tienen motivo de celebración católica.
-En las escuelas se imparte la Religión como asignatura oficial, con un tiempo lectivo que supera el de asignaturas como la educación física o educación artística. (945 horas en infantil y primaria más 450 horas en ESO)
-En muchas escuelas y demás centros de docencia podemos encontrar símbolos religiosos, como crucifijos o imájenes de la Virgen o Jesucristo, en las paredes.
-La Iglesia Católica goza de privilegios fiscales que le eximen de pagar ciertos impuestos.
-Si un miembro de la Iglesia Católica pretende darse de baja en dicha institución, amparándose en la Ley Orgánica 15/1999 de Protección de Datosde Carácter Personal, la Jerarquía puede negarse a hacerlo. Si el caso llega a juicio, a la Iglesia le basta con declarar el documento como Archivo Histórico, protegiéndolo de su destrucción.
-Por lo dicho anteriormente, la opción que plantea la Iglesia es declarar Apóstata al miembro que quiere darse de baja. De modo, que en lugar de eliminar el archivo con los datos del solicitante, se crea otro nuevo que contiene nuevos datos que marcan al miembro en cuestión como apóstata.
-Los dos últimos puntos resultan ser una infracción grave del artículo 16, en su punto 2, de la Constitución de 1978, que establece que: Nadie podrá ser obligado a declarar sobre su ideología, religión o creencias.

Buceando en diferentes sitios web, archivos de sociedades laicistas, hemerotecas,... se pueden encontrar muchos más puntos que demuestran que la Iglesia Católica controla más de lo que muchos quisiéramos la vida pública en países modernos, por mucha fachada que quieran pintar de puramente democráticos y liberales.

Hay que tener en cuenta la diferencia entre LAICISMO y LAICIDAD.

LAICISMO es el movimiento ciudadano, social, y/o político que impulsa un modelo de Estado y legislación que permita vivier en un ambiente de LAICIDAD.
LAICIDAD es, por tanto, el estado en el que debe encontrarse el Estado, valga la redundancia, para que se respete la libertad de pensamiento y de conciencia, sin que unos cuantos que comparten unas creencias no opten a unos privilegios que otros cuantos, con otra confesión o aconfesionales, no puedan optar, haciendo factible la igualdad entre todas las instituciones religiosas o asociacionistas en un mismo nivel. Un nivel muy inferior al de las Instituciones del Estado, que son las que deben gobernar a TODA la ciudadanía, independientemente de la confesión a la que pertenezca cada individuo.

Con esto espero, primero, haber levantado y/o resuelto dudas acerca del tema. Segundo, haber enseñado algo nuevo a cualquiera de los que leáis esto. Y tercero, concienciar al máximo número de ciudadanos para que no crean las falsedades que se lanzan hacia el laicismo y para que se unan a la causa de éste.

Os dejo un enlace a una página que está haciendo una campaña para proponer la reforma Laica del Estado Español, así como un proyecto similar a nivel europeo.
http://www.laicismo.org

¡¡Animaos, y firmar!! Hay unas 18.000 firmas. Hacen falta 25.000 para conseguir que el tema se lleve a debate en el Congreso de los Diputados.

¡¡Salud!!

"La libertad no hace felices a los hombres, los hace simplemente hombres" - Manuel Azaña

jueves, 10 de abril de 2008

De Republicanos...

¿Por qué la República perdió la guerra?

Esta semana, con motivo del 77 aniversario de la II República Española, estoy asistiendo a distintas charlas-coloquios acerca del tema. Anteayer estuve en una conferencia que impartían dos comunistas. Hoy, en la presentación de un libro de un anarcosindicalista. Ambas conferencias muy ilustrativas, interesantes y educativas. Ambas, también, decepcionantes.

Me explico. En realidad, la decepción a la que me refiero se comenzó a forjar en mi interior a medida que, desde que era pequeño, fui conociendo cómo se desarrolló la contienda española entre los años 36 y 39 del siglo XX. Y estalló la guerra. Guerra, respecto a la cual soy totalmente contrario a llamarla Civil dado que en realidad fue una SUBLEVACIÓN MILITAR en CONTRA del gobierno legítimo, así como del sistema de estado, ambos elegidos por el pueblo en las elecciones democráticas de Abril de 1931.

En las conferencias a las que he asistido estos días, en los documentales que he visto, en los documentos leídos y releídos, en los testimonios de supervivientes, allá por donde vea una referencia hacia la guerra incivil, siempre encuentro el mismo fondo.

Anarquistas. Comunistas. Socialistas. Catalanistas... Republicanos en general, vaya. Todos ellos luchaban para defender la IGUALDAD, la LIBERTAD, y la FRATERNIDAD. En última instancia, la REPÚBLICA. Todos contra el Fascismo, que en esos años comenzaba a roer las libertades ya en muchos países de Europa: Alemania, Italia, Portugal...

Aún hoy, esos comunistas, socialistas, anarquistas... están de acuerdo en las barbaridades que se cometieron durante la guerra y en la posguerra. Sin embargo, mantienen la "estúpida" separación, a mi modo de ver, en cuanto a la forma del estado que defendían.

La raíz de todo ello consiste en lo siguiente bajo mi punto de vista. Al principio de la guerra, todos unidos, contra el mismo enemigo: EL FASCISMO. Poco a poco, el Gobierno Republicano, presidido por Negrín (que ya había solicitado dimisión al Presidente de la República Manuel Azaña, que no aceptó el cese bajo ningún concepto) se va acercando a la URSS, único país que se compromente a prestar ayuda en forma de unidades, material bélico y asesores militares y políticos. Hasta ahí bien. El problema viene cuando los altos mandos se empeñan en desarticular todas las milicias e integrarlas en el Ejército Popular. Muchas de estas milicias están formadas por anarcosindicalistas de la FAI, CNT-AIT, etc. Por tanto, no accederían a realizar dicha unión.

Los anarquistas, por su parte, creen que es la ocasión para comenzar a hacer su propia revolución, y comienzan a colectivizar aquellos pueblos que son controlados por estos milicianos. El EP y el Gobierno Republicano tomará represalias contra aquellos anarquistas que comiencen a hacer la revolución, en la justa medida para que las unidades anarquistas sigan luchando en el frente contra el ejército sublevado.

La cosa se propaga por la península, y hasta en las mismas calles de Barcelona, en las mismas trincheras que se han levantado para derrotar al ejército enemigo, comunistas y anarquistas se cubren de sus propias balas.

Y digo yo... ¿Estamos todos gilipollas?

Hoy en día los comunistas se quejan de que los anarquistas comenzaron a hacer su propia revolución. Éstos se quejan de que los primeros no les dejaban hacerla. Ambos se quejan de que los socialistas no hacían nada para estabilizar la lucha obrera, y los socialistas de que cada uno hacía lo que le salía de los hevos.

Y bien... ¿qué hemos aprendido de aquello?

Llevándolo todo a un punto algo reduccionista, allí se luchaba por la LIBERTAD. Se luchaba contra un ejército que quería imponer un régimen totalitario que privaría al pueblo de esa LIBERTAD que estaban defendiendo. Un régimen que arrasaría con los avances sociales, económicos y culturales que se habían logrado durante el periodo republicano. Los FASCISTAS son los responsables de la quema sistemática de miles de bibliotecas. Muchas de ellas bibliotecas escolares, de escuelas construidas en ese periodo. Los FASCISTAS acabaron con el laicismo en España. Acabaron con el derecho de asamblea. Acabaron con la libertad de imprenta. Acabaron con la libertad de expresión. Con la libertad de pensamiento. Con la libertad de razonar por uno mismo. ¡¡ACABARON CON LO QUE CARACTERIZA A LA RAZA HUMANA!! ¡¡ACABARON CON LA RAZÓN!! ¡¡CON LA IGUALDAD!! ¡¡CON LA VIDA SOCIAL Y POLÍTICA!! ¡¡CON LA ESPERANZA DE CAMBIAR EL MUNDO!! ¡¡CON LA ESPERANZA!!

¿Y qué coño defendían los republicanos? ¡¡ESA LIBERTAD!! ¡¡ESA ESPERANZA!!

¡¡El enemigo era el FASCISMO carajo!!

Aún hoy lo sigue siendo. En un mundo cada vez más capitalizado. Donde la globalización es un hecho normal y corriente (a lo que todo obrero que se precie debería oponerse frontalmente). En un mundo en el que los objetivos de los gobiernos se centran en el bienestar, y dejan la política ideológica de lado. En este mundo, es donde la prole del fascismo tiene más posibilidades de proliferar. ¡Por eso debemos estar todos unidos! Catalanistas, abertzales, socialistas, comunistas, anarquistas... ¡¡Todos contra el mismo enemigo de hace 72 años!! Todos contra la incultura, la miseria social, el hambre de libertad. Todos contra esa bestia que lava cerebros, manipula la historia, acalla las voces que le gritan ¡BASTA!.

Todos los que alguna vez creímos en un sistema mejor. Los que creemos que ese sistema estuvo al alcance de nuestra mano. Los que si hubiéramos vivido en ese tiempo hubiésemos luchado hasta el último aliento, defendiendo los valores que nos hacen respirar... Los que creemos en la unidad de la izquierda para derrotar de una vez al FASCISMO en España, y queremos machacar de una vez por todas sus garras, que se aferran al poder cual bebé a su sonajero o niño caprichoso a su juguete.

Todos debemos gritar hoy y siempre hasta que nuestro objetivo se haga realidad, y entonces de verdad creamos en lo de que "la esperanza es lo único que se pierde"... gritemos...


¡¡¡ VIVA LA REPÚBLICA !!!

"La libertad no hace felices a los hombres, los hace simplemente hombres" - Manuel Azaña